Hay artistas que buscan algo toda una vida a través de sus obras. Esteban buscaba la luz, el color y el equilibrio.
En las salas rastreamos su evolución, seguimos los rastros del proceso en las superficies de sus obras, nos sorprendimos con la complejidad de su trabajo que antes nos había parecido tan sencillo.

Samir nos regaló sus sensaciones ante uno de sus cuadros. Quizá os apetezca pararos ante él y disfrutarlo, como referencia os ofrecemos una imagen.
A él le parecía que era rojo, pero no simplemente rojo... que quemaba, que daba calor, que mareaba, que dolía pero gustaba... que tenía una luz que salía desde detrás del cuadro... que parecía que se salía del marco... que era muy sencillo y muy complicado.
Nosotros hicimos algunos experimentos: dibujamos con lazos fluorescentes en la oscuridad haciendo composiciones relajantes, violentas, en profundidad, diálogos de líneas de luz.
También compusimos obras con nuestros cuerpos convertidos en manchas.




Pero... ¿qué sería de nosotros si los artistas no expusieran sus obras?
Quisimos compartirlas con nuestras familias en una exposición.
¡Gracias a todos por venir!